Varios vecinos del barrio denuncian la situación de dejadez en la que se encuentra el espacio comprendido entre las calles Desayuno con diamantes e Isla del tesoro.
Vía Heraldo de Aragón | Los vecinos de Valdespartera están mostrando su preocupación en las últimas semanas por un solar del barrio que se ha convertido, según dicen, en “un agujero de insalubridad”. Está ubicado en la confluencia de las calles Desayuno con diamantes e Isla del tesoro, a escasos metros de un parque infantil y próximo a viviendas.
“Hay un socavón lleno de maleza, las hierbas, de gran tamaño, están amarillas, muy secas y con riesgo de arder con el simple hecho de que alguien se fume un cigarro junto a ellas. Además, no es extraño encontrarte conejos o gatos muertos, y eso teniendo en cuenta que hay niños que juegan en las proximidades”, indica Marisa Jiménez, vecina de Valdespartera.
Jiménez denuncia que “lo peor” es que en ese espacio se vierten “residuos tóxicos, veneno, que está acabando con la vida de algunos perros y a otros se les ha tenido que llevar al hospital”. Otros vecinos de la zona añaden que el socavón “también ha sido utilizado como vertedero de basura, hemos visto dejar muebles aquí, aunque desde la última vez que nos quejamos no ha vuelto a suceder”.
“En Valdespartera muchos residentes tenemos mascotas, y no es normal que tengamos que pagar por la irresponsabilidad de quien no mantiene la vía pública en un buen estado de salubridad, ya da miedo sacar a pasear a los perros”, señala Pedro Ortín, quien tacha de “indignante” que haya personas que se dediquen “a verter sustancias tóxicas en los solares vacíos, generando intranquilidad en el vecindario”.
La Asociación de Vecinos Los Montes de Valdespartera no tenía constancia de estas protestas vecinales, ya que no les han sido comunicadas, pero por su parte, se ha puesto en contacto con el Ayuntamiento de Zaragoza para denunciar el problema y el aviso ya ha quedado registrado. “Nosotros trabajamos por el bienestar del barrio, así que si no se pone solución acudiremos a la Junta de Distrito para exponer lo que manifiestan los que residen por esa zona”, explica Adolfo Lahoz, presidente de la asociación.
Aunque los vecinos han sacado en las últimas semanas su preocupación a la luz, las protestas no son nuevas. Ya en 2016 la asociación Zaragoza Ciudadana recogió una denuncia al respecto por la que no ha obtenido ninguna contestación desde Urbanismo, “que continúa siendo tan opaco como acostumbra desde hace años”, manifiestan los responsables de la asociación. Hace dos años, los vecinos expusieron que el “enorme agujero”, al parecer, tenía un proyecto urbanístico no finalizado y generaba “una situación de insalubridad, debido a la vegetación que había resultado de él, por lo que solicitaban que se finalizara el proyecto inicial o que se cubriera definitivamente”, recuerda Zaragoza Ciudadana.
Los responsables de la asociación cuentan que desde un primer momento (y hasta la actualidad, pues no ha habido cambios) “la pastilla 114, que es la que corresponde con el agujero de Valdespartera, estaba destinada a un equipamiento social, encontrándose dentro de la parcela 132, que pertenece al Ayuntamiento de Zaragoza, y más concretamente al Centro de Urbanismo Sostenible (CUS)». Además, apuntan que ya existía un diseño para la edificación de ese agujero, pero ¿qué ocurrió? “La crisis, como con tantas otras cosas. Pero no puedes tener presupuestado algo, empezarlo, y que luego se abandone a su suerte y en mal estado”, consideran desde Zaragoza Ciudadana.
El acondicionamiento de los solares es una de las mayores preocupaciones de los vecinos de Valdespartera y la mejora de las zonas verdes ha sido la propuesta más votada en los presupuestos participativos por parte de los vecinos del Distrito Sur. En Valdespartera, han salido respaldadas la modificación de las especies plantadas en la parte más cercana a la calle Viridiana por otras que necesiten poca agua y sean seguras para los niños que juegan en este parque, y la eliminación de la zona de barbacoa junto al pinar que continua del parque de la Razón, por seguridad ante un posible incendio.